De ser muy grande para un asteroide o un cometa y muy pequeño para un planeta (200 kilómetros de diámetro aproximadamente), Quirón fue rechazado en una como en otra categoría astronómica. Una primera sincronía muy sutil a los ojos de la Astrología que establece correspondencias entre lo astronómico, lo mitológico y lo simbólico.
Quirón fue nombrado centauro, una nueva categoría de cuerpos menores cuyas orbitas van más allá del cinturón de asteroides, es decir entre los planetas exteriores.
De esta categoría, Chariklo sería el más grande, con 302 kilómetros de diámetro.
Aunque Quirón fue descubierto hace un buen tiempo, el 18 de Octubre 1977, retrogrado y en el grado 3 de Tauro, se tomó tiempo atribuirle sus características de centauro y aún muchas informaciones no están precisas, como por ejemplo su diámetro y la muy posible presencia de anillos.
Otro dato significativo, tiene que ver con que la orbita de Quirón tiene grandes variaciones entre perihelio y afelio, donde penetra dentro de la orbita de Saturno y se extiende más allá de la de Urano. Dicho de otro modo, podríamos verlo como un mensajero, un comunicador que vehicula lo visible con lo invisible, lo personal y estructural de la identidad hacia lo transpersonal y evolutivo de la conciencia colectiva. Apasionante.
Sur orbita alrededor del Sol es de 50 años aproximadamente.
A saber, no solamente Saturno tiene anillos, sino todos los planetas exteriores. Esto tiene un profundo significado Astrológico que exploraremos en otro momento.
No se puede excluir un parecido histórico entre Plutón y Quirón, ambos victimas de incertidumbres que dieron lugar a cambios, rechazos, y modificaciones en su identidad astronómica. Iremos profundizando esto en su momento.
Así que tenemos una primera resonancia simbólica, que curiosamente, se asemeja a su contexto mitológico.
Este contexto es algo Pisciano, en el sentido que no hay claridad (como suele suceder en los acontecimientos mitológicos) sobre varios hechos dentro de la historia de Quirón.
Cronos, paseando por la Tierra en búsqueda de Zeus se enamora de Fílira, una oceánide, ninfa (deidad menor femenina) hija de Océano.
Que sea un amor no correspondido o una relación de engaño (de Cronos hacia Rea su esposa), Fílira se transforma en yegua para huir de Cronos, el cual se transforma en caballo y logra copular con ella. Rea aparece desde luego y Cronos sale corriendo, mientras que Fílira se refugia en los montes de los Palasgos. Allí dará luz a Quirón, pero ante el nacimiento del mismo, se repudia de su apariencia monstruosa mitad hombre y mitad caballo y lo abandona huyendo. Avergonzada por su vida pide ser transformada en árbol de Tilo.
Triste historia que ningún hijo quisiera vivir.
Parecería ser que Cronos jamás conoció su hijo, por el cual la ausencia del padre es absoluta, mientras que el rechazo y el abandono de la madre está a la raíz de la famosa herida Quironiana la más profunda.
Desde luego que la historia de la misma concepción de Quirón, sea en relación a la violación, a la aventura “extra-matrimonial” (que carga culpa, temor y secretos), la vivencia del embarazo que fue muy doloroso y aislado, hasta el nacimiento que fue el inicio de una vida que emerge dentro de un abandono absoluto, de un rechazo profundo, ambos constituyentes de la herida inicial.
No es poca cosa.
Afortunadamente Quirón es rescatado por Apolo y Artemisa, quienes le enseñaran arte, medicina, y mucho más. Progresivamente Quirón se vuelve maestro. Desarrolla una gran sabiduría acerca de todo lo que rodea la capacidad de enfermar como la de sanar, la de conquistar, la música, la lectura de oráculos, la artesanía, la caza, las ciencias en general, pero especialmente la herbolaria, la astronomía. Desde una perspectiva moderna, Quirón era a la vez científico, erudito, sabio, curandero y chaman.
Desarrolló tales habilidades que se vuelve Maestro de Maestros, donde numerosos personajes míticos le pidieron que les enseñara a ellos o a sus hijos, muchos conocidos como Jason, Aquiles, Peleo, Asclepio (fundador de la medicina), Ayax, Aristeo, Acteon.
Su condición mitad caballo mitad humano, en definitiva, le dan un instinto animal con gran fuerza motriz junto a una inteligencia reflexiva y capacidad de aprendizaje propia de lo humano. Era muy diferenciado de los demás centauros, caracterizados por sus instintos y sus modalidades salvajes de relacionarse con los demás.
De hecho, Quirón vivía en una cueva, aislado de los demás y enteramente dedicado a perfeccionar sus artes y saberes.
Algunos mitos resaltan que a Quirón se le fue otorgado el don de la inmortalidad por los dioses, como recompensa por la maestría que había desarrollado y por su aporte al mundo. Otros mitos le atribuyen la inmortalidad por derecho de nacido, ya que era descendiente de un Dios (Cronos).
Sucede que después de años gloriosos, pero humildes como buen sabio maestro era, Quirón fue impactado por una flecha de Hércules que contenía el veneno de la hidra.
No fue en absoluto voluntario el acto de Hércules, pero como numerosísimas de sus acciones, fue destructivo. Es importante realzar el valor de la fuerza bruta de Hércules asociado al deseo y la omnipotencia, caras negativas de la acción del planeta Marte. Hércules estaba peleando con los centauros, borracho por un vino que se le había prohibido consumir, y Quirón alertado ante el conflicto fue acercándose con la intención de ponerle fin a la masacre, y fue injustamente herido.
A pesar de todos sus intentos, Quirón, maestro del arte de la curación, no pudo sanar su herida. El veneno de la hidra era muy doloroso y el sufrimiento que causaba era insoportable, pero por ser inmortal no podía morirse, por lo que era destinado a sufrir por la eternidad.
Finalmente, lo que hizo fue entregar su inmortalidad a Prometeo (arquetipo Uraniano) quien había sido castigado por robar el fuego de los dioses para entregárselo a la humanidad, y así poder liberarse del sufrimiento.
De aquí viene la formula de “sanador herido”. Quirón, quien dominaba el arte de la curación, no pudo curarse.
Zeus colocó a Quirón en los cielos, como la constelación del centauro, en recuerdo de sus logros y de su maestría.
La simbología detrás de este mito es inmensa, rica y abundante. No bastará en un articulo extraer todo el jugo de la historia, pero si trataremos de extraer la esencia.
Cuando nacemos tenemos dos dioses. Papa, y mama. Que estos dos Dioses lo abandonen a uno es una brecha muy profunda en la voluntad de vivir. Esa falta de amor que hará que cargue Quirón la responsabilidad de haber dañado la vida de su madre, de ser responsable por su final triste y de ser un monstruo que no tiene merito de sentir amor ni de ser amado. Esta misma herida profundamente emocional, es la que fue a la raíz de la profunda humildad que desarrolló Quirón en su vida de maestro.
Ahora bien, ¿Qué diferencia tiene la herida Plutoniana con la herida Quironiana?
Lo que distingue una de la otra tiene mucho más que ver con la forma de reaccionar ante ella que la misma esencia de esta. El rechazo, el abandono, produce dolor. Y como mecanismos que se pueden manifestar a raíz de este dolor pueden surgir el odio, la irá, la colera, la envidia, el rencor. Estos son efectos Plutonianos, que si bien tienen cierta intensidad pueden también por supuesto transformarse en poderosos aliados, tras la llegada del perdón, de la aceptación, de la resiliencia, esto por supuesto luego de largos procesos de sanación.
No obstante, la diferencia fundamental con Quirón es que precisamente el fue abandonado, pero también fue adoptado, por así decirlo, por Apolo y Artemisa. Esto es muy importante, porque hubo una herida, pero luego hubo también una salvación, y esto es una diferencia muy propia entre Plutón y Quirón. Con Plutón, a menudo la herida se tiene que seguir infectando lo suficiente para poner en riesgo algo tan importante como para que uno vaya reaccionando. Con Quirón, a la herida inicial se le fue dando medicina mucho tiempo antes de que infectaría.
Este es mi punto. Con Plutón la herida se infecta. Con Quirón no se infecta, sino que por destino llegan estos maestros, que hacen parte de la energía misma de Quirón. Aquí va una información Astrológica de gran importancia: dónde tenemos esta herida es donde también encontraremos salvación. Es un componente muy Pisciano que aparece aquí. Quirón desarrolla maestría en el arte de curar porque sabe que es el dolor. Sabe que es lo que significa sufrir, y como tal esto le da el autentico motivo de querer ayudar, salvar y sanar a los otros, desde una motivación vocacional muy profunda que irradia autenticidad. Ahora el hecho de que la herida no este infectada no significa que deja de ser una herida. Toda herida deja una cicatriz. La dificultad justamente es perder de vista la herida y olvidarse de esta parte de nosotros, porque puede seguir produciendo dolor en la memoria, en el recuerdo.
Uno habla mucho de sanar, pero sanar se puede hasta cierto punto. Uno puede haber trabajado mucho el asunto pero nunca lo podrá borrar de su historia, de su memoria, de su ser.
La herida Quironiana produce un efecto Pisciano mucho más que Escorpiano : nostalgia, tristeza, evasión, adicción, auto-engaño, confusión, disolución. De aquí que mirarla de frente, aceptar que hace parte de uno será un trabajo clave que permitirá justamente que Quirón se vuelve esta llave que abre la puerta de la autenticidad del ser. Es fundamental, irremplazable, y por esta misma razón el ego tendrá a hacer todo lo posible para bañarse en el dolor de la herida sin mirarla, encerrando el ser en su posición de victima. La enfermedad del escapismo, la "victimitis" crónica, es mucho peor que la misma herida.
Luego hay otro factor muy interesante. Quirón se vuelve maestro de maestros, no porque contribuye a la repetición de las enseñanzas que se le fueron entregadas, sino porque desarrolla la capacidad de profundizar, de crear y desarrollar algo que se le fue enseñado, sin perder de vista el nivel de coherencia emocional con el cual se vincula. Aquí va otro significado muy importante que tenemos que utilizar en la interpretación astrológica: la capacidad de ser auténticos, y crear algo muy propio de su experiencia. Esta es la auténtica maestría Quironiana, que se diferencia mucho de la Jupiteriana. Júpiter es maestro del conocimiento, y a menudo transmite en base a ideales, a una comprensión “intelectual”, “filosófica” que ha desarrollado. Quirón enseña en base a la experiencia real de la vida, haciendo alquimia entre lo aprendido y lo vivido.
Podríamos pensar en Quirón como este puente que sintetiza la maestría Sagitariana integrando la realidad emocional dolorosa Escorpiana, poniéndose al servicio incondicional de la vida desde una entrega Pisciana. De hecho, desde lo astronómico se puede desde esta forma, como lleva la experiencia individual “intra-saturnina” hacia los horizontes colectivos transpersonales. Descubre en él algo que pone al servicio de lo colectivo.
En este sentido, registro realmente Quirón como ese lugar dónde tenemos el potencial de manifestar la maestría de nuestro ser. Quirón representa, simboliza la maestría del ser.
Para llegar a esto obviamente tenemos que ver el dolor, identificar la herida, sentirla, reconocer, aceptarla. No se puede sanar sin ver y reconocer la herida.
La dificultad para encontrar a Quirón es ir detrás de las capas protectoras del ego que nos hizo reaccionar ante las heridas para lograr “Saturnizarnos”, es decir, ser enteritos a la hora de socializar, de relacionarnos, de madurar y de hacerle frente a la vida con todos sus componentes. Detrás de la evasión de esta herida, que en algún momento puede haber sucedido, hemos inyectado anestesia pura para poder seguir andando, sin darnos cuenta de que lo que hemos hecho en realidad es amputar una parte de nuestro ser. Muchas situaciones van a ir vivificando este dolor, porque de todas formas la parte que tiene esta cicatriz seguirá siendo eternamente sensible. Una situación donde un movimiento espicha ese lugar tendrá un efecto particularmente doloroso, pero también un recuerdo de humildad.
Otra cosa que es importante interpretar, un efecto que produce la herida Quironiana, es aislamiento. Quirón siempre vuelve a su cueva. Es su refugio, a la vez su lugar de sanación, pero también este lugar donde esta en contacto con esta herida que lo hace único, a la vez sin raíz y en profunda soledad, pero que le da este toque de mago que es.
La cueva de Quirón nos recuerda la dimensión chamánica e iniciática de la experiencia mística. Que sea una búsqueda de visión o un retiro en naturaleza, el principio es el mismo. El retiro es un lugar de encuentro consigo mismo. Donde hay soledad y silencio, donde todas las aguas dejan de agitarse, es donde uno puede verse reflejado perfectamente la esencia del ser. De algún modo, esto es algo que resuena tanto en el verdadero terapeuta como en el verdadero curandero. Es a través de la necesidad de curar sus propias heridas que el hombre encuentra su vocación. Es así que el psicoanalizado se vuelve psicoanalista, el herido se vuelve sanador.
Quirón es tanto medico como profeta, tanto chaman como psicoterapeuta porque domina la sabiduría que no divide, sino que unifica, no resta, sino que suma, donde se entiende y comprende que cada parte es un fragmento de la totalidad. Esto es un paso que todo maestro debe entender para llegar a descubrir su verdadero arte, incluyendo al astrólogo.
La herida Quironiana puede haberse producido en muchos diferentes ámbitos de vida (casas), de diversas formas (signos), en relación con distintos contextos y personas (aspectos). Tantas como nos sea posible imaginar, pero de cualquier modo va a representar algún tipo de discapacidad del individuo. Es algo muy personal, que puede o no ser evidenciado, reconocible. En general es algo muy sutil. Por ejemplo en aspecto tenso con Mercurio, es posible que la forma de pensar o de comunicar del individuo sea muy particular, y que no sea aceptada por algunos miembros del entorno cercano, lo cual produce un rechazo y una herida al respecto. Puede ser también algún vinculo de hermandad que genere la quiebra emocional. No podemos representar todas las posibilidades, y como bien lo sabemos en la interpretación astrológica no conviene recetar cada una de las posibles manifestaciones porque cada carta es muy propia de cada individuo y se debe interpretar acorde con la totalidad y no de forma aislada. Lo importante es que esta dificultad, esta diferencia, esta llamada “discapacidad” ante la mirada de la sociedad conformada por una normalidad ilusoria, debe ser plenamente aceptada por el individuo ya que allí hay también un gran talento. Por ejemplo Mercurio – Quirón puede tener dificultad en expresar ideas desde lo racional, pero por cierto su forma de pensar abarcará dominios mucho más intuitivos y lejanos que no serán fáciles comunicar. No va a vincularse con facilidad con cualquier persona porque tendrá percepción muy aguda de la persona mucho antes de conocerla, como para saber si querrá acercarse o no. Esto produce aislamiento, pero talento. Puede ser también una persona que este tartamudeando en alguna época de la vida, lo cual genere una fuerte sensación de inferioridad, pero también una poderosa humildad donde luego lo que saldrá de mi boca tendrá una dimensión sagrada. Nuevamente, las posibilidades son múltiples, es a cada uno de encontrar ese lugar de retracción que dio lugar a una maduración interna de una sabiduría propia del individuo.
Así que además de estos significadores, Quirón marcará en nuestra carta pautas vinculadas con el dolor y la enfermedad, ya sea física o psíquica, así no tenga contacto con casas de salud. La lectura dinámica de sus aspectos vinculando casas y signos correspondidos dará información detallada sobre la habilidad para sanar, la tendencia a la evasión, a no querer confrontar la herida, las personas y situaciones involucradas en relación a este sufrimiento que puede involucrar el abandono, el rechazo, la discapacidad, la falta de raíz o la confusión al respecto de la esencia de lo que soy. Nos informará también sobre nuestra capacidad de enseñar, de amaestrar nuestro saber en relación a la interiorización de nuestros aprendizajes. Nos dirá donde y como tendemos a excluirnos, aislarnos, retraernos. Nos hablará del don que hay detrás de la integración de esta esencia, de esta autenticidad. Quirón en relación al Sol afectará la voluntad de vivir y la legitimidad por tener este derecho, con la Luna la infancia y la capacidad de abrirse a su mundo interior emocional y así sucesivamente.
Es común que donde se encuentre Quirón estemos asumiendo una posición de victima, muy Lunar e infantil, por no querer reconocer la herida y mirarla de frente. Especialmente cuando Quirón esta en Cáncer o en aspecto a la Luna sucede, pero incluso en otros ámbitos es un efecto muy propio del aislamiento que proporciona. La victima necesariamente se aísla, no tiene fuerza para actuar ni avanzar.
Quirón no busca reconocimiento, recordemos el símbolo de la cueva. Busca la autenticidad del ser. Como tal es importante recordarlo para entender que no necesariamente muchas personas famosas tendrían un Quirón en el ASC o angular, por ejemplo, porque justamente la presencia Quironiana privilegiada en la carta natal tiende a generar una necesidad de interiorización muy fuerte, y no de exteriorizarse de forma permanente como es el caso de las personas reconocidas. No obstante, se podrá observar algunas cartas de gran interés con posiciones de Quirón destacadas, como por ejemplo la carta de Sadhguru, con Quirón fuertemente posicionado en Acuario en casa 9, cuadrado a los nodos y en trígono a Venus, o la de Osho en casa 12 en trígono con Saturno la Luna y Venus, sextil con Plutón y cuadratura con Júpiter. Podríamos ubicar el Quirón de Wayne Dyer en Cáncer en casa 4, sabiendo que pasó su infancia hasta los 10 años en orfelinato, o el de Alejandro Jodorowsky en casa 12 en conjunción partil con Júpiter al trígono de Neptuno. Mucho hay por observar, analizar, y muchas conclusiones para sacar.
Si Quirón es un punto tan importante en la carta, y realmente lo es, es porque es como una puerta que se abre ante el valor del ser en reconocer algo de mucha fragilidad, vulnerabilidad y sensibilidad que hemos tenido que encerrar detrás de cuatro candados en las profundidades de nuestro ser. Algo que no permitía crecer. Algo peligroso ante mi integridad. Adultos, podemos reconocer ese algo e ir abriéndole la puerta utilizando esa llave Quironiana (el mismo símbolo de Quirón es una llave, pensada originalmente como OK para decir Objeto Kowal). Esa llave permite acceder a otro nivel de conciencia, porque detrás del acto de valor de mirar hacia lo más vulnerable, sensible y autentico de nuestro ser, logramos traspasar un umbral de autenticidad irreversible donde la senda que recorrimos se va modificando. Es importante recordar que no vemos el mundo como es, sino como somos. En este sentido, empoderar este Quirón es algo que modifica nuestra percepción profunda de nosotros y permite que vayamos dándole fuerza al protagonista de nuestra aventura, a saber, nosotros mismos, y como tal esto permite que el camino se haga verdadero. Esto es iniciático. Produce un proceso de transformación muy profundo.
¿A nivel colectivo que aportaría Quirón?
En el momento de su descubrimiento -el cual siempre resulta ser clave de la energía simbólica del planeta- fue un auténtico momento de despliegue de la medicina alternativa. Hubo un literal renacimiento de las medicinas ancestrales, las sabidurías de los pueblos antiguos, un apogeo de la medicina alternativa que hasta la fecha se sigue desplegando, dónde el ser abre su conciencia a una totalidad muchísimo más amplia, rica y autentica que la limitada visión científica tradicional, o las estrechas ideologías religiosas. Por cierto Quirón resuena también con la ecología, la protección animal, el ecosistema. Alrededor de su descubrimiento es cuando se ha ido manifestando también atención hacia los daños por el medioambiente. Sin embargo, pienso que Quirón es más un portal de la conciencia, y que su manifestación es mucho más discreta e interna y relacionada con un desarrollo de la conciencia colectiva, que tiene que ver con lo espiritual, lo trascendental.
¿Qué dignidades para Quirón?
Por cierto, cada maestrito con su librito. Desde mi punto de vista, creería que Quirón resuena profundamente con Piscis. Alberga una función Pisciana muy profunda, muy mística, muy propia de la sensibilidad que abre la puerta de los cielos. Con Sagitario también se relaciona mucho, pues a la vez por razones mitológicas como la relación con el centauro, tanto como la capacidad de amaestrar un saber, de volverse ese sabio maestro. En un sentido más lejano, hay cierta posibilidad de incorporar gran sabiduría a través del aislamiento, de la soledad, del retiro, que resuena desde ese lado con Capricornio, pero no lo suficiente para atribuirle alguna dignidad en este signo.
Pienso que Quirón podría encontrar su exaltación en Escorpio. Intuyo que es el lugar donde sus poderes medicinales y la profundidad de sus saberes alcanza su mejor nivel. Es donde tanto el dolor como la curación se manifiestan con el nivel máximo de intensidad.
¿Algo más?
Un detalle que me resuena. Quirón fue descubierto en el grado 3 con 50 minutos de Tauro. El grado sabiano de Tauro de este lugar expresa lo siguiente : “El vaso de oro inaprensible al pie del arco iris”.
Majestuosa formulación que tiene, a mi parecer, una especial resonancia Quironiana. Existen muchas formas de interpretar ese símbolo. Para mi resuena como que el verdadero valor de la vida se encuentra en la conexión con Dios o con la totalidad. La esencia verdadera del ser se manifiesta en alquimia entre la materia, el cuerpo, simbolizado por el vaso de oro, y el arco iris, la plenitud de nuestra esencia espiritual. Es un autentico recuerdo que el verdadero tesoro de la vida se encuentra en el arcoíris, símbolo de la plenitud espiritual. Este símbolo sabiano expresa la naturaleza propia de Quirón : una puerta entre lo divino y lo humano.
En este sentido, y conforme a la muerte de Quirón, la maestría del ser que representa no necesariamente aporta gloria a la vida. De hecho es algo muy propio del verdadero chaman. Realiza su camino de forma discreta, porque no tiene nada que reclamar ni que pedir, mucho menos el reconocimiento o la gloria de haber logrado algo. Quirón fue grande en su vida, y partió con humildad. Por cierto, sabio como era, no pudiera haber concebido la muerte como algo negativo, pero de seguro entendió perfectamente que había llegado el momento apropiado, ni más ni menos. Evidentemente la flecha de Hércules lo alcanzó, pero no hubo ni ira ni colera de parte de Quirón, es simplemente algo que tenia que suceder. Los maestros dicen que al final uno vuelve al origen, esto resuena con el simbolismo de la casa 4. Los astrólogos decimos que como nacimos viviremos. Quizás sea lo que le tuvo que suceder a Quirón.
Finalmente, por si acaso no haya quedado claro, es evidente que Quirón tiene lugar en el contexto interpretativo de lo Astrológico.
Seguirán más artículos sobre Quirón, tratando de detallar algo acerca de su interpretación por signos, casas, aspectos, y conforme a sus tránsitos.
Grandioso y exquisito, rico y sentido.-