Del 29 de Diciembre 2021 hasta el 10 de Mayo 2022
Muy interesante y peculiar en primera instancia analizar la furtividad de este transito de Júpiter que saldrá rápidamente de Piscis el 10 de Mayo y solamente reingresará retrogrado un mes no más a fin de año para como despedirse.
Es cierto que Júpiter pasará encima del Sol de los Piscianos, por tanto procurará una sensación de fluidez, de alegría, de entusiasmo como resultado de una conexión sincrónica con la vocación, esto es, el deseo fragmentario de mi propósito y mi dirección en esta vida. Esto es cierto a nivel psicológico, más sin embargo es obvio que todo análisis debe, para obtener un fuerte grado de constatación, someterse a una comparación precisa con el mapa natal. Entre otros : como esta mi Sol en relación a Júpiter, que influencias tienen los demás planetas de mi carta en relación con mi Júpiter natal y que aspectos hará el transito de Júpiter en Piscis hacia los planetas de mi carta natal. Solamente así, obtendremos un panorama preciso que seguramente se pondrá constatar y observar en la vida.
¿Ahora bien, cual es la resonancia de este transito, cual es la reflexión, cual es la energía de la Tierra que se va a sintonizar, a vibrar con este transito?
Siempre podemos observar cualidades y defectos que se pueden derivar del estado celeste de un planeta, especialmente cuando este no se encuentra en dignidad alguna, como en el caso de Júpiter en Piscis. Si para algunos sigue siendo Piscis su antiguo dominio, es cierto que podemos realizar algunas "soldaduras analógicas" tales como nos gusta hacerlas en Astrología, porque precisamente, de esto trata hablar este lenguaje.
Así que Júpiter direcciona, deja fluir el camino, y si tradicionalmente permite abrirse a lo espiritual, por lo menos ideológicamente, quizás en Piscis esto se convierte en una verdadera expresión de servicio. Este es el punto. En Piscis, Júpiter orienta su benevolencia y su protección hacia las personas, o los seres más vulnerables. Se dirige esta energía de caridad hacia el servicio más desinteresado, más solidario, dejando fluir libremente esta capacidad que todos tenemos de poder ayudar naturalmente y compasivamente a los que necesitan de nuestra ayuda. Esto implica los seres humanos, pero también los demás seres indiscriminados por Piscis : plantas, animales, arboles, las aguas de los ríos y mares...
Si Júpiter conecta con la prosperidad y la representa a menudo, allí en el signo de los Peses de ninguna forma se expande el interés por el material, bien al contrario, y es precisamente por esa razón que pueden aparecer grandes materializaciones. Cuando actuamos benévolamente sin buscar el lucro, entonces aparecen oportunidades de magnitud mucho superior. Júpiter en Piscis puede, es cierto, hacer aparecer fortunas desde la nada, pero ojo, porque también las puede hacer desaparecer.
Como Júpiter amplifica todo lo que toca, en los Peses es la imaginación, la sensibilidad, la resonancia mística y unificadora que se va a magnificar. Por lo tanto es correcto canalizar esta enorme cantidad de emociones y sensaciones que puedan surgir a través del arte, de la escritura, de la meditación y de todo lo que aporta equilibrio y serenidad. Para las personas que más planetas tienen en Piscis, hay que hacer cuidado a las estafas, engaños e ilusiones.
Otro asunto que puede aparecer mucho con este transito es el enamoramiento. Que más Jupiteriano en Piscis que el enamoramiento. Un estado de felicidad temporal y subjetivo donde aparece la alegría y el entusiasmo más ilusorio y ensoñado con una total desconexión y separación con la realidad Saturnina.
Pero también encuentros místicos, momentos mágicos de conexión con el si-mismo, de recuperación incomprendida en términos de salud y de vitalidad.
Es un buen tiempo para buscar inspirarse, alejarse de toda la contaminación mediática que suele compartir grandes cantidades de miedo y de drama, y darse las experiencias necesarias para poder reconectar con la dimensión ceremonial, sagrada y mística de la vida.
Si Júpiter nos habla de Dios, en Piscis se encuentra en todos y en cada uno, porque cada uno lo llevamos por dentro. Nada esta separado.
La creencia espiritual de Júpiter en Piscis es : somos uno. De aquí que van estos estados de compasión incluyente y de servicio indiscriminado, porque este transito abre los caminos hacia el amor universal.
Júpiter en Piscis también puede mucho aportar conexión con la oración y el rezo.
Es tiempo de chistes dulces, amorosos, tiernos.
Idealmente se puede tener más contacto con el mar, con el agua en general, esto facilitará la limpieza y conexión con lo espiritual.
Bueno esto es, no más, una introducción que espero les pueda resultar útil.
Ojo con la conjunción de Júpiter con Mercurio y Neptuno alrededor del 20 de Marzo. Puede resultar catastrófica por un exceso de sensibilidad. Mejor abstenerse de tomar decisiones y acciones estos días.
¡ Un saludo y que los astros les llene de bendiciones !
Baptiste Le Bras
Director del CEIA
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